La cardiopatía congénita es la malformación congénita más frecuente, llegando a afectar a entre 8 y 9 de cada 1.000 recién nacidos vivos
El Hospital Regional Universitario de Málaga ha adquirido un nuevo ecógrafo car-diógrafo de última generación que permite generar imágenes de muy alta calidad cuya elevada resolución posibilita detectar cardiopatías de forma más ágil y rápida en pacientes en edad pediátrica. Entre las ventajas que incorpora está la disminución de pruebas diagnósticas de repetición en las patologías más complejas.
Esta herramienta se ha ubicado en la Unidad de Cardiología Infantil del Materno Infantil y se suma a dos equipos de los que ya disponía el centro sanitario. Así, el jefe de sección de esta unidad, Juan Ignacio Zabala, asegura que "esta permite la detección tanto de cardiopatías congénitas como adquiridas, desde el vientre materno y hasta los adultos".
El nuevo eco cardiógrafo de última generación sirve para detectar cardiopatías a recién nacidos, lactantes, niños y adultos, si bien al estar situado en un centro sanitario pediátrico como el Materno Infantil se destinará para realizar diagnósticos en niños y bebés de la provincia de Málaga. Entre las principales ventajas de la nueva adquisición está la seguridad que esta ofrece en el diagnóstico, puesto que genera imágenes de muy alta calidad.
El nuevo eco cardiógrafo está equipado con dos sondas multifrecuencias que permiten explorar todos los rangos de edades. Su principal avance es que tiene capacidad de generar imágenes en 3D en tiempo real, lo que permite llevar a cabo un estudio más preciso del corazón y de sus válvulas, lo que evidencia su gran capacidad de cálculo. Esta tecnología, valorada en unos 100.000 euros, también es capaz de producir en tiempo real dos vistas simultáneas del corazón.
Esta nueva tecnología sustituye a un equipo anterior y permite detectar nuevas patologías o anomalías con mayor facilidad y seguridad. Asimismo, se va a poder incrementar las cifras de pruebas diagnósticas. "Su alta calidad disminuye el tiempo de exploración en las cardiopatías complejas y en los pacientes con malas ventanas, aquellos con deformidades torácicas u obesas, se puede disminuir el tiempo de la exploración", agrega el doctor.
La cardiopatía congénita es la malformación congénita más frecuente y afecta a entre 8 y 9 de cada 1.000 recién nacidos vivos. "Hoy en día con el diagnóstico precoz, la mejora de la técnica quirúrgica, los resultados de los cateterismos cardiacos terapéuticos y los cuidados intensivos, más del 90% de los pacientes con cardiopatías congénitas llegan a desarrollar una vida casi normal con muy buena calidad de vida", explica Zabala.
La mayoría de las cardiopatías congénitas graves precisan de tratamiento quirúrgico, aunque en ocasiones se puede intervenir mediante un cateterismo cardiaco. El Hospital Materno Infantil realizó el año pasado más de 100 operaciones con cirugía extracorpórea y unos 40 cateterismos terapéuticos para paliar este tipo de patologías.
La Unidad de Cardiología Infantil del Materno Infantil ha realizado desde el año 2002 más de 8.000 eco cardiografías fetales detectando numerosas malformaciones cardiacas en los fetos que el servicio de Ginecología remite ante sospechas de una afectación en el corazón. Juan Ignacio Zabala afirma que "gracias a la calidad de la imagen los diagnósticos serán más fáciles y rápidos".
Cada año la Unidad de Cardiología Infantil del Materno Infantil atiende cerca de 8.000 consultas, de las que aproximadamente la mitad suponen el primer contacto entre los profesionales y el paciente y sus familias, cuando se les da información respecto a la problemática cardiaca del menor. En lo que respecta a las pruebas diagnósticas, la media anual de las eco cardiografías es de alrededor de 9.000, de las que alrededor de 750 se realizan a fetos aún en el vientre materno.